El senador Aníbal Fernández y la diputada Diana Conti habrían ingresado
por sus respectivas Cámaras proyectos similares, fomentando una discusión que
se extiende a la opinión pública.
Los
legisladores del Frente para la Victoria
Diana Conti y Aníbal Fernández dieron ingreso a dos proyectos
para la extensión del sufragio a partir de los dieciséis años, reduciendo en
dos años la habilitación para votar. Hasta el momento, sólo el oficialismo y el
opositor Frente Amplio Progresista se habrían manifestado a favor del contenido
general de la iniciativa.
Siempre se
han deslizado desde comunicadores conservadores expresiones nocivas hacia los
jóvenes, ahondando en lugares comunes del prejuicio. Violentos, promiscuos,
indolentes e indisciplinados, estos sujetos carentes constituirían una
peligrosa construcción incompleta tan susceptible de la desordenada caída al
mundo de las drogas como del ingreso a redes delictivas. Por tanto, este
carácter de inacabados los comprendería como incapaces de una auténtica
expresión política, siendo fácilmente tentados por el engaño y la demagogia.
No obstante,
es necesario mencionar que la
diferenciación entre los derechos inherentes a adultos y los adquiridos
paulatinamente por los jóvenes es cada vez más estrecho: el desarrollo de la
sexualidad, el consumo de drogas legales, la conducción de automóviles e
incluso el ejercicio de la paternidad son espacios de libertad individual
capaces de una altísima nocividad personal y pública, para los cuales se
presupone un nivel de racionalidad aceptable para quien hace uso de ellos. Esta
misma responsabilidad se trasladaría ahora precisamente en el derecho al
ejercicio del voto desde la edad de 16 años.
Nunca los
adultos han dejado de pensar en los jóvenes; fueron tradicionalmente quienes
eran enviados al combate cuerpo a cuerpo en las primeras filas, los soldados de
cada guerra por la instalación de un servicio militar obligatorio, los
portadores de las nuevas ideas rechazadas en sociedades prejuiciosas, los
perseguidos políticos. En tiempos más recientes, las multinacionales de todo tipo
los han estudiado y condicionado para hacerlos un mero sujeto consumidor,
perdiendo ya todo su histórico potencial revulsivo.
Lamentablemente,
la experiencia reciente nos advierte al respecto la triste moraleja de que las
puertas que cierra la
Política , en tanto ámbito de discusión del bien colectivo,
las abre el Mercado, a condición de renunciar a la consciencia y zambullirse en
el ordenado caos de la indiferencia.
Algunos
textos al respecto
No es mejor establecer que la mayoria de edad sea a los 16 para todos los derechos y obligaciones , me parece que si pueden votar son penalmente responsables como adultos tambien
ResponderEliminarLa verdad deberían ir a la escuela a estudiar. Estos borregos de La Cámpora deberían ponerse a estudiar en lugar de lavarle la cabeza a otros. Que trabajen y después voten, a ver si son tan independientes.
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